El RPG de Bethesda impulsó los ingresos y el número de suscritos a Xbox Game Pass durante el trimestre que cubre de julio a septiembre.
Microsoft ha revelado sus datos financieros del primer trimestre del año fiscal -para la compañía, de julio a septiembre- y han sido muy buenos: unos ingresos de 3900 millones de dólares, los mejores para un primer trimestre de Xbox y un récord del fabricante en un trimestre que no corresponde a Navidades. La clave tiene un nombre: Starfield.
Los ingresos generales de la división de juegos aumentaron un 9 % respecto al año pasado, impulsado principalmente por el contenido first party y Xbox Game Pass. Starfield, el esperado RPG de Bethesda, se estrenó el 5 de septiembre y aunque no tenemos datos de ventas sabemos que fue el más exitoso en Estados Unidos durante el mes pasado y alcanzó 10 millones de jugadores durante el primer mes entre compras y jugadores de la suscripción.
Satyda Nadella, director ejecutivo de Microsoft, confirmó que Starfield impulsó Xbox Game Pass al conseguir el día con más suscripciones añadidas. Los ingresos por el contenido y servicios, que es lo que más dinero ingresa en Xbox, creció un 13 % gracias al crecimiento de Xbox Game Pass.
Los ingresos por consolas descendieron respecto al año pasado
El punto negativo del trimestre fue un descenso en ingresos de hardware, un 7 % menos que en el mismo trimestre de 2022. Se vendieron menos consolas, aunque la caída en ingresos se palió en parte por la subida de precios. A diferencia de Nintendo y Sony, Microsoft no informa de las consolas vendidas en el trimestre o año.
En los datos del informe no se ha tenido en cuenta la adquisición de Activision Blizzard, que fue cerrada este mes y por tanto entra en el segundo trimestre de su año fiscal. Esto permitirá en un futuro incluir Call of Duty, Warcraft, Diablo, Guitar Hero, Tony Hawk’s Pro Skater, Overwatch, Crash Bandicoot y otras sagas en la suscripción de Xbox Game Pass a partir de 2024.
